El involucramiento parental en la educación no solo mejora el rendimiento
académico, sino que también fomenta actitudes positivas hacia la escuela,
fortalece las habilidades sociales y reduce las tasas de deserción escolar. Los
niños cuyos padres están activamente involucrados en su educación tienden a
tener mejor rendimiento en pruebas estandarizadas, mejor asistencia escolar y
una mayor probabilidad de completar estudios superiores.
Además, también está asociado con el desarrollo de habilidades blandas, como la
autorregulación, la resiliencia y la capacidad de trabajo en equipo, estas son
esenciales para el éxito a largo plazo en un mundo laboral cada vez más complejo
y demandante, asimismo estos estudiantes tienden a tener una autoestima más
alta, mejores habilidades de resolución de conflictos y una mayor capacidad para
manejar el estrés y la presión académica.
De igual manera, el involucramiento parental contribuye a la creación de un
entorno de aprendizaje más positivo en el hogar, donde la educación es valorada y
priorizada, esto, a su vez, puede influir en las expectativas que los niños tienen
sobre sí mismos y su futuro.
El hecho de que los padres se involucren en el aprendizaje de sus hijos existen
diferentes razones por las cuales dificulta su participación como es la falta de
tiempo debido al trabajo, falta de entendimiento de los contenidos escolares
haciendo que los acudientes se sientan inseguros sobre cómo apoyar
debidamente a sus hijos y más que todo a medida que avanza de grado
académico, por lo cual en las instituciones educativas deben brindar orientación
para que los padres superen estos desafíos y puedan ser partícipes en la vida
escolar de sus hijos, esta orientación debe tener en cuenta “características
demográficas de la familia, así como a su cultura. Considerar las actitudes,
creencias y conductas de los padres, es igualmente importante para el éxito
escolar de los hijos” (Sánchez-Escobedo, 2014, p.9).
Según Rojas-Neira (2019) cuando los padres no son partícipes en el proceso
académico le dejan la responsabilidad netamente a los docentes, haciendo que los
estudiantes se desmotiven y sientan que no tienen su apoyo, por lo cual no le
brindaran la importancia a las actividades que estas requieren. Por lo cual, es
fundamental que los padres de familia se involucren en el aprendizaje de sus hijos
ya que es desde el hogar que se comienzan a establecer las reglas, rutinas,
autonomía y la responsabilidad.
Existen diversas estrategias para que los padres que no saben cómo involucrarse,
participen en la educación de sus hijos, ya que no es solo brindarle las
necesidades vitales sino también es brindarles la importancia que se merecen en
cualquier contexto.
Estrategias efectivas de participación parental en la educación:
1. Comunicación continua con la escuela: Establecer una comunicación
con los profesores, estando pendiente de tareas, reuniones escolares,
conferencias de padres, eventos escolares, manteniéndose informados
sobre el progreso académico de sus hijos tanto de manera presencial como
digital.
2. Apoyo en las tareas escolares: no se espera que los padres actúen como
maestros, sino que están ahí para sus hijos ya que el apoyo en las tareas
puede ser valioso y necesario, dado que se debe alentar a la autonomía en
el estudio.
3. Participación en actividades extracurriculares: Las actividades
extracurriculares, como deportes, música, arte y clubes académicos,
ofrecen oportunidades valiosas para el desarrollo personal y social y los
padres pueden apoyar a sus hijos alentándolos a participar en estas
actividades y asistiendo a eventos como partidos deportivos o
presentaciones.
4. Fomento de la autonomía: A medida que los niños crecen, es importante
que los padres les permitan tomar decisiones y asumir responsabilidades,
esto puede incluir la gestión de su tiempo, la elección de actividades
extracurriculares o la toma de decisiones relacionadas con su futuro
académico, a su vez les ayuda a los estudiantes a desarrollar la
autoconfianza y la capacidad de resolver problemas de manera
independiente.
Estas son solo algunas formas en las cuales los padres pueden estar más
involucrados en la educación de sus hijos, dado que, al participar activamente, los
padres no solo refuerzan el aprendizaje académico, sino que también fortalecen el
vínculo familiar.
Referencias
Rojas-Neira, G. (2019). partivipaio de los padres de familia en el proceso de
aprendizaje-enseñanza en los niños de quinto de basica en la escuela.
Cuenca, Ecuador: Universidad politecnica saleciana sede cuenca.
https://dspace.ups.edu.ec/bitstream/123456789/17892/1/UPS-
CT008469.pdf
Sánchez-Escobedo, P. (2014). Discapacidad, familia y logro escolar. Universidad
Autonoma de Yucatán, Mexico: Revista Iberoamericana de Educación.
https://rieoei.org/historico/deloslectores/1538Escobedo.pdf
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